
Te has preguntado alguna vez ¿por qué las cosas no te funcionan?, o ¿por qué no puedes concentrarte en las actividades que quieres hacer?
Muchas veces el desorden que nos rodea, tanto en nuestra casa como en nuestro entorno general, nos lleva a un ruido mental que nos impide poner foco hacia donde queremos llegar. Muchas veces, estamos tan bloqueados, que ni siquiera sabemos hacia dónde queremos llegar.
Si bien, el contexto general es mucho más profundo, te invito a dar pasos simples al inicio y comienza ordenando todo tu mundo. Algunas cosas tóxicas en nuestro hogar nos impiden que las energías fluya libremente, atrapando todo aquello que nos rodea.
LAS TOXINAS DE LA CASA SON:
1. Objetos que ya no utilizas.
2. Ropa que no te gusta o no utilizas hace tiempo.
3. Cosas feas.
4. Cosas rotas.
5. Viejas cartas y notas.
6. Plantas muertas o enfermas.
7. Recibos, periódicos y revistas antiguos.
8. Ropa interior vieja, con huecos.
9. Zapatos estropeados.
10. Cachivaches de todo tipo que llaman al pasado.
También, muchas veces tenemos ciertos hábitos de acumular cosas:
En el sótano y azotea, las acumulaciones se vuelven sobrecarga.
En la entrada, restringen el flujo de la vida.
En el piso, nos jalan hacia bajo.
Encima de nosotros, son dolores de cabeza.
Sobre la cama, contaminan el sueño.
Esparcidas por la casa, sobrecarga de emociones.
Si ponemos el orden el practica, descubriendo todos aquellos elementos que nos desconciertan, lograremos mayor enfoque, pero también un Desapego a las cosas materiales.
La salud mejora.
La creatividad crece.
Las relaciones mejoran.
Hay mayor capacidad de raciocinio.
Mejora el humor.
Nos podemos hacer algunas preguntas que nos ayudan a entender por qué tenemos apegos y ¡así lograr el desapego!
¿Por qué estoy guardando eso?
¿Será que tiene que ver conmigo hoy?
¿Qué sentiré al liberar eso?

Ten siempre claro que, la limpieza de adentro se refleja por fuera.
1. Evite ruidos extremos.
2. Menos luces fuertes.
3. Menos colores saturados.
4. Menos olores químicos.
5. Menos recuerdos tristes.
6. Termine proyectos inconclusos.
7. Cultive energía positiva en su casa.
Mientras ordenas, observa como todo en tu mente y nuestro corazón también comienzan a ordenarse. Practiquemos el desapego con cosas materiales que sólo llenan nuestro espacio vital.
Esta práctica nos ayuda a poner en orden temas más trascendentales y así entendemos que necesitamos constantemente estar revisando cómo está nuestro orden interior.
Espero que este post haya sido de utilidad para ti.
¡Te dejo un abrazote!
